¿Conoces qué son los microcuentos? Algunos escritores tienen la capacidad de escribir toda una historia en un límite de caracteres. Recopilamos los mejores para que te enamores de ellos como nosotros.
Por: Kevin Baltazar O.
¿Es necesario utilizar muchas palabras para poder contar una historia llamativa? Contrario a lo que piensen muchas personas, esto es probable y, en varias ocasiones, es hasta mejor. Los escritores de microcuentos -o microrelatos- se han vuelto conocidos actualmente debido a esa capacidad que tienen de expresar sentimientos o contar anécdotas con pocas palabras.
La moda del Microcuento llegó justo en el apogeo de la red social Twitter la cual se caracteriza por su rapidez, llegada al usuario y que la información que se querrá publicar tendrá que ser resumida en 140 caracteres.
En ese contexto se encontraban poetas y cuentistas quienes querían dar a conocer sus historias a través de este medio social pero que encontraban al límite de caracteres una traba importante. Con mucho ingenio y habilidad lograron sortear este obstáculo y hasta crearon una especie de nuevo género: ‘Tuiteratura’ que tuvo una excelente recepción de los amantes de las letras. Chapa esa bala, Arjona.
Fue tal el éxito de los microcuentos que se crearon algunas cuentas que se han especializado en publicar uno o más de ellos por día teniendo como referencia directa a @microcuentos, cuenta con más de 500 mil seguidores a lo largo del planeta, más de 2 mil retuits y favs por post y el año pasado editó un libro con Alfaguara de microrelatos.
Recopilamos algunos de los mejores microcuentos para que te enamores de ellos como nosotros ya lo hicimos hace tiempo atrás:
Si hubiera sospechado lo que se oye después de muerto, no me suicido.
Oliverio Girondo
El problema es que era fuego y se enamoró de la lluvia
Vale Zambo
Mientras hablaban se gestaba el desastre. Él buscaba besarla y ella encontrar la química por algún lado.
Carlos Aymí
Todos eran abstemios. Jesús convirtió el agua en vano.
César A. Betancur
Dile a la ausencia que se vaya ella también.
Míriam Rodríguez
A veces, de puro masoquista, reviso si estás en línea.
Hilda McCalvo
Se me ha dormido un brazo. Está soñando que te abraza.
Alberto Ramos
Abrió el libro, como si fuera la gabardina de un exhibicionista. Nadie lo veía. Escupió el comienzo.Se saltó todo.Y leyó el final.
D.Miklos
Allí, donde termina tu mirada, empieza el frío.
Karmelo C. Iribarren
—Quiero perderme en tu laberinto —dije ya completamente perdido.
Carlos Aymí
Su silencio era suicida, por eso a nadie le extrañó encontrarla ahogada.
Lenin Pérez Pérez
Mis ojos echan de menos esas conversaciones con los tuyos.
Víctor Gáez
Le dio un beso en mitad de un poema. Fue el mejor berso de su vida.
Isaías Lafuente
Ella le enseñó su lunar, él se hizo astronauta.
Marcos Ley
A uno de los dos le quedó grande aquel abrazo.
Benjamín Griss
Vio como Donald Trump tropezaba con las escaleras de la tarima y casi se mata. Fue una experiencia cercana a la suerte.
Marcos Ley
Era un lobo diferente, en vez de aullarle a la luna la besaba.
Valeria Muñoz
—¿Y nunca más la volviste a ver?
—Estando despierto nunca más.
Carlos A.Sevilla
Fue amor a primera vista. Lástima no poder resistir la tentación de mirarse por segunda vez. Ignacio Urtiaga
Si prometes no asustarte,
te dejo que abraces,
cada uno de mis miedos.
Carmen Alcatráz
Perdóname, he tenido un déjà vu: tú y yo ya nos hemos olvidado antes.
Carlos Clavijo
Le regaló una flor con el último pétalo, y le dijo: tú decides.
Carlos Gómez B.